Incluir germinados y brotes en tu dieta

Al incluir germinados y brotes en tu dieta hay que tener en cuenta que cada uno de ellos tiene matices diferentes, como por ejemplo, los germinados de brócoli, que poseen un sabor fuerte, pero son maravillosos para fortalecer la digestión y aumentar los niveles de ácido clorhídrico en el estómago, o los germinados de rábano, que tienen la capacidad de depurar y desintoxicar el hígado. Los germinados de fenogreco son puro corazón y alma, perfectos para apoyar el flujo que existe entre la integración de nuestras emociones y sistema endocrino, contribuyendo para la salud de nuestro centro cardiaco, cuerpo mental y nuestra alma. Son especialmente útiles para regular la actividad de las glándulas adrenales en la producción de cortisol, así como la regulación de la producción de hormonas tiroideas.

Los germinados de lentejas, por ejemplo acumulan mucha energía, proporcionan proteína fortificante de fácil asimilación, además de ofrecer carbohidratos de base que ayudan a realizar cualquier trabajo físico, equivale a comer una gran comida pero quedando con mucha energía después, sin la sensación de somnolencia.  En esta misma lista se encuentran germinados como el poroto-frijol de soja, frijol mung, brotes de girasol, germinados de garbanzos, poroto-frijol azuki y micro acelgas rizadas (micro-kale), entre otros.

Cada una de los diferentes tipos de germinados y brotes
brindan cualidades especiales

De la misma forma que las personas que brindan apoyo en la vida, cada una de los diferentes tipos de germinados y brotes brindan cualidades especiales que se van descubriéndola medida que se van consumiendo, es solo abrirse  y observar su efecto. Para mejores beneficios se recomienda comer dos tasas de germinados por día.

Cuando se germinan semillas, es aconsejable vincularse con ellas
como si fueran animales domésticos

Cuando se germinan semillas, es aconsejable vincularse con ellas como si fueran animales domésticos, ya que ellas se nutren también de compañía, es decir, de la energía de benevolencia y amor que se pueda irradiar al  cuidarlas. Son capaces de recoger la energía del ambiente, hasta cualquier cosa que se hable a su alrededor. Siempre se debe intenta tratar a los germinados con alegría, se recomienda hablarles, darles aliento, colocar las manos sobre ellas.

El alimento reconoce las necesidades individuales y ajusta su configuración nutricional de tal forma que pueda nutrir de la mejor forma

Hacer crecer la propia comida significa que el alimento reconoce las necesidades individuales y ajusta su configuración nutricional de tal forma que pueda nutrir de la mejor forma posible. Los germinados y brotes son especialistas expertos en alinearse a las necesidades específicas de salud por su capacidad adaptogénica.

No se deben cocinar los germinados, para obtener sus beneficios. . Los germinados y los brotes son una fuente incalculable de probióticos, esos microorganismos son importantes para la salud intestinal y la producción de vitamina B12. Estos probióticos sobreviven si los germinados son ingeridos crudos.

Rociar los germinados con agua que contenga minerales del mar, diariamente, ayuda a mineralizarlos, de tal forma que recarga su poder curador.

Germinados del tipo rábano, brócoli, fenogreco, acelga rizada y girasol deberían comerse a la hora del almuerzo, ya que ellos sustentan los niveles de energía a lo largo del día.  Los germinados de porotos-frijoles y lentejas deberían ser ingeridos al momento de la cena, por que irradian calma y relajación al sistema nervioso, al final del día.

Preparar un jugo hecho a base de pepino, germinados de arvejas y brotes de girasol podrían, con el tiempo, mejorar la capacidad de visión nocturna de una persona.

 Audio de Irdin: Visión ética y valor oculto de la alimentación (Visão ética e valor oculto da alimentação)
Audio completo: http://www.irdin.org.br/acervo/detalhes/5626
Delimitación del tiempo del audio: de 19’12 asta 22’52