Los miembros de la Red-Luz Planetaria de Argentina, a lo largo y ancho del país, desarrollan diferentes tareas voluntarias de sintonía interna y servicio activo en comunidades con diversos tipos de necesidades.
Recientemente, uno de los Grupos Red-Luz de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con ocasión del «Día del Niño» organizó lo que se denominó «La Fiesta del Barrilete» en el «Comedor Los Gurises» ubicado en la localidad de San Francisco Solano.
Luego de muchos meses de pandemia y sin poder realizar estas tareas con los niños de manera presencial, el reencuentro fue maravilloso. El grupo de voluntarios compartió juegos, adivinanzas, ronda de canciones, piñatas, carreras de embolsados… actividades repletas de sonrisas, de alegría sana, con diversión y mucho amor. También compartieron alimentos, golosinas y juguetes.
En esa hermosa mañana soleada los barriletes y molinillos danzantes se hicieron presentes en el barrio, seguramente tocando los corazones de los niños, pero también de todos los vecinos que asistían a las actividades, algunos participando y otros como espectadores.
La fraternidad, la unión y la alegría fueron los principales protagonistas de este fraternal festejo.
Comedor Los Gurises: breve historia y contexto
En el Barrio Los Eucaliptos y bordeando el arroyo Las Piedras, de la localidad de Francisco Solano, se encuentra en Comedor Los Gurises. El lugar está a cargo de Elsa, una señora pensionada que hace muchos años creó el comedor en su casa y, luego de un tiempo, lo trasladó a una casilla en un terreno frente a su casa.
Con las inundaciones ocasionadas por el arroyo la casilla se destruyó. Recién en el año 2009, gracias a donaciones de materiales de construcción se mejoró el predio. El objetivo era que los chicos tuvieran un lugar fijo para almorzar todos los días y realizar actividades de esparcimiento, así como resguardarse de las inundaciones. Fueron años muy difíciles pero el comedor se fue tornando el centro de ayuda y contención de los niños y sus familias.
Al comedor asisten más de 100 niños y niñas de todas las edades y brinda apoyo a sus familias. Toda esta tarea es sustentada por los esfuerzos de Elsa y donaciones de grupos de voluntarios y colaboradores.
La música como un camino de servicio; la sonrisa y el juego como lenguaje de cura y contención.
Hace casi 20 años que uno de los grupos de Red-Luz Argentina Centro asiste al Comedor Los Gurises. Es una historia hermosa, es una historia con melodía propia. El grupo del Coro de Buenos Aires ha mantenido esta tarea a lo largo del tiempo, a través de encuentros organizados para compartir música, actividades con instrumentos musicales y expresión corporal. El objetivo es llevar alegría, es llevar paz, es generar sonrisas, crear en cada encuentro un «espacio diferente» un espacio de contención y afecto en donde se generan charlas con los chicos y sus familias, se generan vínculos sanos y a través del amor se intenta suplir sus necesidades. Se comparten también donaciones de alimentos, se realizan tareas de mantenimiento del edificio, pero por sobre todas las cosas, se mantiene encendida la llama de la dignidad frente a las adversidades.
María Cristina, una voluntaria de la Red-Luz Argentina nos decía: «lo que me mueve a ir al comedor es sentir las necesidades que estos niños están pasando. Es poder mostrarles que existe otra realidad, llevarles una pequeña luz, una semillita de esperanza… Es llevarles amor, mucho amor que además de tantas otras cosas, es lo que ellos más necesitan para salir adelante».
La Fiesta del Barrilete organizada por el grupo del Coro de Buenos Aires fue una celebración de la vida, una celebración del acto de «volver a estar juntos» luego de todos estos meses de pandemia. La Red-Luz Planetaria Argentina agradece a todos aquellos voluntarios que forman parte de esta y tantas otras tareas de servicio.