La Red-Luz Guarujá, representando la Fraternidade – Federación Humanitaria Internacional, hizo una donación de alimentos para la Comunidad-Luz Figueira durante el mes de septiembre, cuando tuvo lugar el 57º Encuentro General. En total fueron distribuidos 344 kgs de alimentos en cuatro diferentes áreas de la Comunidad-Luz y en dos instituciones de la ciudad de Carmo da Cachoeira, Minas Gerais, Brasil.
Las donaciones fueron recibidas desde el programa del Ministerio de Agricultura del Brasil que encamina, para entidades filantrópicas, alimentos de alta calidad denominados “Salto de Muestras”. Los productos son retirados en el Puerto de Santos. Desde julio pasado, la Red-Luz viene realizando la tarea de distribuir las donaciones en la comunidad Morrinhos 4, en Guarujá, ciudad del litoral del estado de Sao Paulo, Brasil.
Los alimentos donados a la Comunidad-Luz Figueira fueron retirados en el Puerto de Santos el 9 de septiembre y distribuidos el 13. Fueron 168 kgs de ajo, peras, nectarina, melocotón y ciruela. Otra parte de la donación, 176 kgs de limones, manzanas, peras y ciruelas, fueron retirados el 16 de septiembre y entregados en la Comunidad-Luz el 19.
Cuatro áreas de la Comunidad-Luz Figueira, que está situada en la ciudad de Carmo da Cachoeira, recibieron las donaciones: Sagrada Casa Hermano Pio, Corazón Sagrado, Tierras de la Hermandad y F3. Las cajas de ajo fueron donadas para la Casa de San José y distribuidos por los Misionarios de la Fraternidade -Federación Humanitaria Internacional, para el asilo y el hospital de Carmo da Cachoeira.
“Fue una gran sorpresa para todos nosotros, ya que vinieron varias cajas de fruta de muy buena calidad. Llegaron de una forma muy buena, todavía un poco verdes. Entonces dejamos las frutas embaladas y cuando fuimos a servirlas estaban muy sabrosas y las aprovechamos en un 100%, algo muy bueno. Yo sólo tengo que agradecerles a todos”, dijo Melissa, coordinadora de la Sagrada Casa Hermano Pio.
Para las Tierras de la Hermandad, lugar de la Comunidad-Luz Figueira donde se hospedan muchos jóvenes y en donde viven seis niños y cuatro familias, fueron donadas frutas como nectarinas, peras y melocotones.
“Recibimos las frutas con mucho cariño, pues sabemos que es difícil de manifestar estos tipos de frutas como donación. Para los niños es muy importante tener algunos alimentos visiblemente atractivos y con un buen olor. A ellos les gustaron muchos las frutas y todos nosotros estábamos muy agradecidos. Toda la cocina quedó impregnada por un olor a frutas muy agradable”, dijo Ananda, coordinadora de las Tierras de la Hermandad.
