Los jueves, la Comunidad-Luz Nueva Tierra, afiliada a la Fraternidad – Federación Humanitaria Internacional (FFHI), se une en una única actividad: el Mutirão (trabajo grupal voluntario)de San José.

 «Sabemos que los Mutirões manifiestan aquello que en el día a día no podemos concluir o ni siquiera comenzar. Tareas de gran envergadura, cambios importantes, limpieza profunda, cosecha extensiva, entre otras actividades», explicaron los miembros de Comunidad-Luz.

Pintura y mantenimiento de los jardines de la Casa Corazón de Jesús

Desde los más pequeños hasta los más viejos, todos participan como pueden, niños, jóvenes, adultos, hombres, mujeres, ancianos y quien quiera, porque hay espacio para todos, basta estar dentro de un mismo espíritu: el de la unidad.

 «En los Mutirões la fuerza va más allá de lo físico y los resultados van más allá de lo que se ve. Para quien vive la experiencia de formar parte de un Mutirão, la energía del grupo y su potencial es nítida y casi palpable. Al final de un Mutirão, todos se sienten revitalizados internamente, porque no hay división ni dispersión, sino un único propósito que va más allá del cumplimiento de la tarea propuesta», opinan.

Formando nuevos plantines para las plantaciones

Los miembros de la Comunidad-Luz Nueva Tierra también destacan que «los Mutiroes reciben los impulsos para la vida grupal evolutiva, ya que el ser humano debe aprender a vivir en unión con los demás y con los Reinos de la Naturaleza, plantando, así, la semilla para la Nueva Tierra».

Y ruegan para que «estos Mutiroes inspiren a la humanidad al servicio grupal, no para sí misma, sino para un propósito mayor y en beneficio de todos».

Reparación de las sillas del comedor realizada en el taller de carpintería

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