Miércoles 11/10 a domingo 29/10

El día 11 de octubre, siete misioneros de la Fraternidade – Fedración Humanitaria Internacional llegaron a la ciudad de Pacaraima para las actividades de la Misión Roraima Humanitaria. La ciudad está en la frontera con Venezuela y se convirtió en uno de los  principales puntos de entrada de los inmigrantes venezolanos en Brasil. Pacaraima queda en el nordeste del estado de Roraima, cerca de 200 kilómetros de la capital Boa Vista.

El grupo misionero volvió a la  ciudad casi un año después de la primera actividad del grupo en la región.
«Percibimos que la situación de la inmigración tiene falta de atención y recursos, y la violencia en la ciudad parece haber aumentado», dijo Imer, misionero de la Fraternidade.

Durante las primeras semanas e trabajo, los misioneros se contactaron con distintas instituciones (iglesia, municipalidad, servicios de salud, Secretarías, Asociaciones) y grupos como los Médicos sin Frontera. Conocieron también el lugar donde será la sede de los misioneros en la ciudad y que servirá como alojamiento del grupo y también depósito de donaciones.

Visita al abrigo e obras

Trabajo en las calles

Los misioneros visitaron el lugar, del futuro albergue, de los inmigrantes, en la ciudad, que está en obras. «Como el albergue aún no está preparado, tenemos que comenzar a trabajar en la mejorar las condiciones de la calle. Así como sucedió al inicio de los trabajos de la Misión Roraima en la  ciudad de Boa Vista. Tenemos que ayudar en la alimentación, organizar las consultas de salud y la recreación de los niños. realizar todo esto en la calle hasta que el albergue esté listo», explicó Imer.

Asentamiento de los inmigrantes indígenas

Inmigrantes indígenas en una esquina de Pacaraima

El primer contacto con los inmigrantes venezolanos ocurrió en un asentamiento de indígenas de la etnia Warao. Algunos ya eran conocidos del albergue de Boa Vista. «La mayoría son nuevos inmigrantes, que no se trasladaron para otros lugares.  Conversamos con los Aidamos (líderes indígenas) y establecimos un vínculo para iniciar un censo actualizado de las familias que están en Pacaraima y viviendo en condiciones de calle», dijo Imer.

Inmigrantes no indígenas viviendo en un escenario

Inmigrantes no indígenas

Doce familias de inmigrantes venezolanos no indígenas están alojados  en un antiguo escenario de la  ciudad, que tiene techo. Los misioneros visitaron a las familias y vieron que hay niños con problemas de salud debido a que están expuestos al frío. Algunos fueron derivados al hospital. Se realizaron donaciones de arroz, productos de higiene y limpieza, y algunos plásticos que se usarán para cubrir el lugar donde se encuentran y de esa manera poder protegerse de la lluvia.

Censo y registro

Censo de Inmigrantes

Los misioneros de la Fraternidad realizaron, durante algunos días, un censo, y registraron que, actualmente, viven en el lugar unas 160 personas, divididas en  tres grupos familiares, cada uno con su líder indígena.

«Tuvimos contacto con otro grupo de la etnia Panare, que proviene del estado de Bolívar, en Venezuela. Ellos son artesanos y también están inmigrando y pasando por la misma falta de recursos ya que no consiguen vender sus artesanías. Son más retraídos y silenciosos, pero después de algunas horas conseguimos relacionarnos», dijo Imer.

Junto al censo se realizó un registro de inmigrantes, basado en el formulario provisto por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ACNUR). El registro servirá para la creación de identificación personal que  será necesaria para el acceso al futuro albergue de Pacaraima.

Desayuno y Almuerzo

Apoyo en la distribución del desayuno

De lunes a viernes, por la  mañana, los misioneros ayudaron en la distribución del desayuno que ofrece la Parroquia de Pacaraima para alrededor de 300 venezolanos indígenas y no indígenas. Una vez a la semana el grupo da apoyo en la preparación y distribución del almuerzo ofrecido por la Iglesia, que luego se distribuye en el asentamiento.

«Desde la llegada de la Fraternidade, estamos sintiendo que las personas y los órganos públicos se están movilizando más, ya que se ofrecen personas para ayudar», dijo Imer.

El día 26, miembros de la Defensoría Pública de la Unión realizaron actividades para verificar situaciones irregulares como explotación sexual y de trabajo. Se realizó un registro con los inmigrantes y se les informó sobre sus derechos.

Salud

Uno de los problemas de salud que ocurren con frecuencia con los inmigrantes indígenas son las heridas en la piel que se infectan por las malas condiciones de higiene. Los misioneros hicieron curaciones, diariamente, en las partes del cuerpo que están más expuestas. En algunos casos es necesario internar al paciente. También se atendieron casos de heridas y conjuntivitis.

Asociación Canarinhos da Amazônia

Vivencia creativa con los niños

La Asociación desarrolla un trabajo con alrededor de 120 inmigrantes venezolanos no indígenas, 60 de ellos son niños. Una de la actividades que desarrolla es el coro, que está formado por los niños. Los misioneros donaron alimentos para la Asociación, y participaron del coro y realizaron una actividad de dibujo y música con los niños.

Acompañados por los miembros de la Iglesia Bautista, los misioneros visitaron distintos lugares improvisados donde están viviendo algunas familias de inmigrantes venezolanos no indígenas. Se donaron alimentos y productos de higiene.

«La situación de los inmigrantes es muy complicada, porque la ciudad es muy pequeña y no ofrece muchas posibilidades y ellos no tienen medios para emigrar para otros lugares. Sin embargo, permanecer en esta región de frontera les permite ir con frecuencia a Venezuela para llevar alimento a los familiares», explicó Imer.

Preparativos para el albergue

Preparando canastas básicas

Con el avance de las obras del albergue de Pacaraima, los misioneros comenzaron a preparar canastas básicas con alimentos y ropa. Las mismas serán distribuidas en el momento en que las familias ingresen al albergue.

Un camión que transportaba materiales donados por la Iglesia de los Mormones y que se dirigía al albergue tuvo problemas en la carretera y se quedó parado a 30 km de Pacaraima. Los misioneros consiguieron un camión de la Municipalidad de la ciudad y trasladaron la carga.

El domingo 29, se realizó una  misa en la Parroquia de la ciudad con la presencia de varios inmigrantes. El coro de niños venezolanos de la  Associação Canarinhos da Amazônia (Asociación Canaritos del Amazonas) se presentó e hizo um homenaje a los niños que sufrieron um accidente de automóvil en Pacaraima y están internados en la ciudad de Boa Vista.

Prensa

El equipo de la TV de Francia tomo imágenes y realizó entrevistas.