Lunes 8 a 14 domingo

En la segunda semana del mes de mayo, los misioneros dieron apoyo en las dos casas de las Hermanas de la Caridad de Madre Teresa de Calcuta. En la casa 2, realizaron un pequeño “mutirão” (trabajo grupal voluntario) para reparar los armarios utilizados por las mujeres albergadas en esos lugares. En la casa 1, los misioneros realizaron tareas de mantenimiento, arreglo, pintura y reparación de los bancos utilizados en el refectorio y clasificaron ropa para donaciones.

Los misioneros de la Fraternidade – Federación Humanitaria Internacional acompañaron  a las Hermanas de la Caridad en la visita a una prisión masculina y femenina, en la ciudad de Atenas. El grupo conversó con las mujeres de distintas nacionalidades, llegadas principalmente de países de África, Europa Oriental y Asia, que están presas por diferentes razones.

Un número de inmigrantes es atraído con falsas promesas de trabajo, realizadas por algunos grupos y cuando llegaron a Grecia se encontraron con una realidad distinta de la prometida. Están sin empleo y terminan siendo ilegales en el país, muchas veces son apresados. Así, ven frustrada la ilusión de una nueva vida o de poder partir desde allí hacia otros países de Europa.

El grupo continuó con el trabajo de organización y distribución de ropa y calzado en Caritas Hellas, apoyo que ha sido constante junto a los refugiados. La institución recibe voluntarios de diferentes países y tiene un trabajo bastante importante en Grecia. En esa semana los misioneros trabajaron con dos chinas que huyeron de China a causa de la  persecución religiosa. Actualmente, están matriculadas en facultades locales para poder estudiar.

El sábado 11, se realizó un trabajo de limpieza en la entrada del predio de Caritas Hellas, donde circulan más de 500 personas diariamente.

En la actualidad Grecia recibe inmigrantes de más de 100 nacionalidades. Un lugar de convergencia debido a una fascinación, una ilusión de una vida mejor. Es evidente que solo la minoría de los inmigrantes consigue establecerse, dignamente, ya sea en Grecia, ya sea en países vecinos.