Sendos encuentros de confraternización pusieron el broche de oro al año lectivo 2017 en los centros educativos de la Comunidad-Luz Figueira y Casa Luz de la Colina, afiliados a la Fraternidade-Federación Humanitaria Internacional.

En un marco de simplicidad e impregnados  por aires navideños, ambos encuentros estuvieron marcados por la espontaneidad y la sana alegría de los pequeños y adolescentes que frecuentan estos espacios de formación integral. En los dos días, los presentes interactuaron de manera bastante viva y estrecha, compartiendo momentos de oración, manifestaciones artísticas y refrigerios.

La escuela Parque Tibetano-Comunidad Figueira inició en el 2017 el Nivel Medio. “Estamos en un periodo de transición, de síntesis de las diferentes pedagogías que fueron trabajadas hasta el momento, en busca de una pedagogía más viva e intuitiva”, explicó Tainá, coordinadora de la sede educativa localizada en el Núcleo Corazón Sagrado de la Comunidad-Luz Figueira.

Confección de velas navideñas

Entre tanto, la escuela Parque Tibetano de la Casa Luz de la Colina, localizada en la ciudad de Carmo da Cachoeira, también comenzará una nueva etapa en el 2018, luego de la formalización de su Jardín de Infantes. La institución comenzó sus actividades en el 2013 y en el 2015 habilitó su Jardín Infantil, recordó su coordinadora, Analia Calmon. La propuesta educativa es desarrollada de forma bastante dinámica, por medio de las artes, actividades lúdicas y el contacto con la naturaleza (jardinería y huerta comunitaria).

“Nos gusta mucho este lugar, fuimos muy bien acogidos a pesar de que no formamos parte de la Comunidad-Luz Figueira. Nuestra hija (Laura, 4 años) se siente muy bien aquí y el año próximo vamos a traer a nuestra otra hija (María, 2 años)”, afirmaron Lester Gonçalves y Graziella Mansur, pobladores de Carmo da Cachoeira.

Arte Educación

Creaciones de los niños de Arte Educación

En la Unidad Arte Educación de la Casa Luz de la Colina hubo exposición de fotos y videos de las actividades desarrolladas. Cada niño entregó a sus padres un album de mandalas con las creaciones que realizó durante el año. También hubo momentos de oración, reflexión y cánticos entonados con mucha alegría, dentro de un espíritu navideño y ecuménico.

“En Arte Educación buscamos ayudar a los alumnos a autoconocerse, a amarse y superar sus limitaciones humanas, a descubrir dentro de sí su lado luminoso, sabio, pacífico y amoroso, fortaleciendo la convivencia grupal y creando oportunidades para practicar la solidaridad, la cooperación, la unión, la tolerancia, el respeto y el amor”, destacó la coordinadora de la entidad, Maria Helena Paiva.