La flor de los campos, que se abre, ofrece generosamente su belleza y su perfume sin otras finalidad más que la de donarse al Creador. El canto del pájaro y el rumor del mar, ¿qué otra cosa son sino un permanente oficio divino? Nosotros, seres humanos, creemos siempre que tenemos otras cosas  para hacer, cosas más importantes que glorificar al Creador.

El despertar espiritual no nos lleva afuera de este mundo, sino que nos ayuda a iluminar la estadía terrena, y redimirla. Cuando se recorre un camino peligroso por la vida terrena, se abandona todo lo que es inferior y se parte en búsqueda del Cosmos. En este caso, el ejercicio espiritual, por medio de los caminos de una Ley Mayor, divina, llevará al hombre al despertar.

La esencia del despertar es traer luz a la obscuridad, y transformar ignorancia en conocimiento, es colaborar con el proceso de redención del planeta, es servir a la Luz. Solo los renacidos pueden despertar. El verdadero poder es solamente aquel que se obtiene sin que se lo imponga. Mientras el hombre permanezca usando el poder propio, continuará siendo esclavo de él mismo y continuará impotente, como es ahora.

El despertar de la luz interna es, para cada individuo, un proceso singular. Si él trascendiera los “dolores” que caracterizan este momento, conocería la alegría que viene después. Existe en todos una fortaleza semioculta que asegura esa realización. En la raíz de tal fortaleza esta la esencia misma del yo interno.

La consciencia del ser humano es infinita, pues se profundiza y se amplía en la existencia universal. Todo lo que la conduce a la expansión y que le impide involucrarse con el mundo de la forma ayuda a la revelación de su esencia.

Artículo de Referencia: Diario O Tempo, de 27/sept./2015
Nombre del artículo: O conhecimento espiritual ajuda a iluminar e a redimir a vida (El conocimiento espiritual ayuda a iluminar y a redimir la vida)
Audio de Irdin: Conversas con Triguerinmho 811 (33’10» a 3’40»)
Audio completo: http://www.irdin.org.br/acervo/detalhes/12330