Desactivar la autodestrucción planetaria
Tema: Cura planetaria, Cura de la Humanidad

Nunca la vida sobre el planeta estuvo tan amenazada

(IMPULSOS, Trigueirinho, p. 120)

El Mensajero Divino San José, nos instruye que por más que no seamos gobernantes y no tengamos la potestad de comenzar o acabar con una guerra, para que las guerras del mundo sean abolidas, antes debemos erradicar de nuestra propia consciencia la ira, la competencia, la avaricia, el orgullo, la codicia. De esa manera, debemos actuar con todo, porque es de a poco que el Reino de Dios descenderá al mundo. Para eso, la armonía con la cual ese Reino se instalará dependerá de cómo la consciencia humana se prepare para recibirla.

Existe cierta aprehensión, y el mismo temor muchas veces inconsciente, ante la llamada transición planetaria, y pocos reconocen que el transcurso de esa decisión será el resultado de lo que cada uno haga para transformar en sí la consciencia humana y, en consecuencia la consciencia planetaria. Uno de los pasos a seguir es abrir las puertas de la propia consciencia y no querer nada más para ´si, sino el bien y el amor para los demás, generando así la gran cadena de Fraternidad.

Mientras la humanidad acepte las armas

Mientras la humanidad acepte las armas, la Misericordia de Dios será poquísima.
Mientras muchos no oren, será muy escasa la Gracia de Dios.

Por más que no sean gobernantes y no tengan la potestad de comenzar o acabar con una guerra, para abolir las guerras del mundo, deben aplacar, en sus propias consciencias, la ira, la competitividad, la avaricia, la codicia. Y, de esta forma, deben actuar con todo, porque es de a poco que el Reino de Dios descenderá al mundo. Pero, para ello, la armonía con la cual ese Reino se instalará dependerá de la preparación de la consciencia humana para recibirla.

Muchos temen la tan citada transición planetaria, pero pocos están reconociendo que el curso de esa transición será el resultado de lo que cada uno pueda hacer para transformar, en sí, la consciencia humana y, en consecuencia, la consciencia planetaria.

Mediten en lo que les digo y no en lo que les dije en días anteriores. Encontrarán en Mis palabras las claves para alcanzar la redención de una forma pacífica y armoniosa.

De forma insólita e incisiva ao coração humano

En su mensaje del 17 de abril de 2017, Cristo se expresó así, de forma insólita y certera al corazón:

Sean finalmente ciudadanos de este Universo y vivan en unidad con una Gran Hermandad Celestial, que ayuda a esta raza actual a no activar las bombas, ni la autodestrucción, como lo fue en los años cuarenta. Mi Padre se refugió en Su Fuente, cuando se activó la bomba de Hiroshima. Un gran dolor se sintió en todo este Universo local. Los grandes sabios guardianes de las estrellas, se postraron para implorar por misericordia y perdón. Los invito a imitar este ejemplo antes de que todo suceda.

Mientras la humanidad acepte las armas, poquísima será la Misericordia de Dios. Mientras muchos no oren, muy escasa será la Gracia de Dios. ¿Quién sustentará compañeros, el Puente de Luz que se extiende en los abismos, formado por la unión de todas las almas, de todos los corazones del mundo que dicen sí al Universo?

Mi Corazón es la gran bomba de Amor para el mundo. Es el Sol radiante de la Misericordia, que es flagelado por las injusticias de la humanidad. Pero Mi Gracia es más grande que todos los errores del mundo.

Vengo a conceder en esta última instancia del planeta, una misericordiosa expiación. Deseo profundamente en Mis oraciones que todas las almas del mundo se sirvan de esto, para que Mi Consciencia y Mi Corazón puedan triunfar en la humanidad.

Yo Soy el Sacerdote de la Paz y deseo lo mejor para las almas. Bienaventurados sean los que escuchan de corazón y cumplen las promesas de su Redentor.

Que así sea. Cristo Jesús Glorificado

El tema de la cura planetaria deberá continuar!