Abolir las guerras del mundo
Tema: Cura planetaria, Cura de la Humanidad

Si los hombres clamaran por Luz, la transformación del planeta será mucho más rápida

(IMPULSOS, Trigueirinho, p. 32)

Abolir as guerrasLa Enseñanza Superior nos dice que no se debe juzgar nada ni a ningún ser humano, pero que se debe buscar en sí mismo las raíces de las malas acciones de la humanidad, y transformarlas dentro de cada uno de nosotros. Cuando se juzga a alguien o alguna cosa nos sentimos separados del mal que juzgamos, lo que no está bien. Actuando de esa forma, estamos solo perdiendo una preciosa oportunidad de transformar en nosotros lo que debe ser disuelto en la consciencia humana para que el mundo pueda transformarse.

Sucede lo mismo con las guerras: Es muy simple y cómodo señalar el error de las naciones y juzgar a los que están en guerra, pero como ya vimos, las guerras comienzan dentro de nosotros mismos, y allí deben ser disueltas, antes de que se puedan resolver en el mundo.

Mensaje simple y directo que nos impulsa a la transformación

El Mensaje de nuestro Padre e Instructor, San José, es muy simple y directo al corazón y sus palabras estan cargadas con la energía correcta que nos impulsa a la transformación de nuestra consciencia. Para acoger su amorosa Instrucción basta solo con abrir el corazón, pues Él respeta, antes que nada, nuestro libre albedrío.

Hoy les pido que no juzguen las actitudes de los seres humanos del mundo, sino que transformen dentro de ustedes las raíces de todas las malas acciones de la humanidad.

Cuando ustedes juzgan algo, por más que sea una atrocidad, sus consciencias solo sienten que están separadas de ese mal, sienten que no les pertenece y, así, pierden la oportunidad de cambiar la consciencia humana por medio de la propia transformación.

El corazón humano es único y lo que hoy sucede en el mundo es el fruto de una construcción maléfica planetaria, que contó no solo con la colaboración de Medio Oriente, sino también de todos los seres humanos que, en sus pequeñas o grandes malas acciones  colaboraron para que el corazón humanos se apartara de Dios.

Mi Casto Corazón ahora viene para ayudarlos a curar a la humanidad y esa cura comienza en cada uno.

Es muy simple y cómodo señalar los errores de las naciones y juzgar a los que están en guerra y a los que no aceptan a los inmigrantes, sin percibir que tampoco ustedes aceptan a un hermanos que se aproxima a sus vidas con una condición interna, física y espiritual diferente de las suyas y que los hará cambiar completamente para que puedan acogerlo con amor.

Deben buscar dentro de ustedes lo que los separa de los que son diferentes, deben buscar curar el miedo a transformarse para acoger, aunque sea internamente, a los que no entran en los patrones que sus mentes aceptan.

De la misma forma como está sucediendo con los emigrantes, muchas almas pasarán por sus vidas y no encontrarán en sus corazones el amor que necesitaban para ser acogidas y transformadas por la Presencia de Dios.

Comprendan que, si aprenden a amar verdaderamente, ustedes depositarán en la consciencia humana un código de amor que podrá cambiar muchos acontecimientos del mundo.

Ya no juzguen, no se separen de los errores humanos como si ellos perteneciesen a los otros. Reconozcan en sí lo que debe ser transformado y permitan que la compasión les de la sabiduría que necesitan para no juzgar, sino para tornar el juicio en transformación y amor.

Yo los amo y los conduzco, como su Padre e Instructor, San José Castísimo
Mensaje de San Jose de 22 de septiembre de 2015

Para que no se instale el odio en las almas
es necesario que se viva el amor.

Mensaje de San José de 23 de septiembre de 2015

El tema de la cura planetaria deberá continuar!