La Comunidad-Luz Figueira, afiliada a la Fraternidade – Federación Humanitaria Internacional, reunió a sus miembros y colaboradores externos en una jornada de confraternización y de integración espiritual. Participaron unas 170 personas, de todas las edades, provenientes de las distintas áreas de hospedaje, así como de Carmo da Cachoeira y otras ciudades del Brasil y del exterior. La reunión se llevó a cabo el domingo 20 de noviembre en el Núcleo Corazón Sagrado.
El objetivo principal fue buscar una mayor aproximación con el Núcleo de Amor presente en la contraparte interna y profunda de Figueira, según explicó fray Supremo do Rei Jesus, monje de la Orden Gracia Misericordia, coordinador de la Comunidad-Luz Figueira y del Centro Mariano de Figueira.
Los presentes desarrollaron un amplio programa que comenzó con una sintonía espiritual. Luego fueron conformados equipos de tareas para llevar a la práctica la donación de sí y el contacto interno. Los grupos se dedicaron a armonizar los diversos espacios del local: jardines, depósitos, corredores, ventanales, sala de recepción, comedor comunitario, sector de hidroterapia, sala de oración y sala de Adoración al Santísimo. También hubo tareas de limpieza en el patio de la escuela Parque Tibetano, de la Comunidad-Luz Figueira. Un grupo se ocupó de preparar el almuerzo y otros apoyaron con la selección de porotos y la confección de bolsas de papel para los basureros.
Finalizadas las labores, alrededor de las 11.00 de la mañana, los asistentes limpiaron y guardaron las herramientas utilizadas y luego se dispusieron a participar de otra sintonía espiritual. A continuación compartieron el almuerzo y la armonización posterior. Tras un breve periodo de descanso, oraron la Coronilla de la Divina Misericordia y luego hubo Comunión Ecuménica.
Reacciones
“Me impresiona la paz y el amor que se respira hoy aquí. Es algo que penetra la piel. Me gusta mucho la fraternidad que reina entre todos y como, a pesar de tanto movimiento y de los ruidos de los pequeños y de los animales, todo transcurre con mucho orden y armonía. Hoy pude redescubrir y sentir de cerca todos los valores que irradia Figueira”, comentó Graciela Martínez, colaboradora argentina.
Marina Vásques, residente en Brasilia (DF) y colaboradora hace 27 años, declaró: “me siento muy bien, para mí Figueira es mi primera casa, acompañé el trabajo desde el principio, me parece muy bien que haya momentos como este en que puedan integrarse a todas las áreas, eso es muy positivo”.
Para Francisca López, del estado de Paraná, y para Breno, de Belo Horizonte, Minas Gerais, lo más resaltante fue el espíritu de unión y de unidad que pudieron percibir. “Hoy pudo sentirse mucho amor, en las tareas y en las sintonías. Sentimos esa semilla de nueva humanidad, que está pronta para manifestarse en la superficie de la Tierra”, amplió Francisca.
La jornada finalizó con la exhibición de una película de animación –Kung Fu Panda-, que con bastante humor, transmitió varios mensajes dirigidos al corazón de los espectadores.