Todos los meses, el Centro Mariano de Figueira organiza una experiencia peregrina que es esperada por grupos de oración y peregrinos de diferentes regiones de Brasil y en la que, en ocasiones, también participan devotos de otros países. Consecuentes o nuevos en la experiencia, recorren el camino trazado con la devoción y alegría propia de una vivencia espiritual.

Así, el fin de semana del 12 al 14 de octubre de 2018, tuvo lugar otra actividad, con la particularidad de que esta vez se inició en el marco de las festividades de Nuestra Señora Aparecida, patrona del Brasil, y de la conmemoración, en el Brasil, del Día del Niño, lo que originó un movimiento complementario a la peregrinación.

Niños al encuentro de María

La mañana del viernes 12, el Centro Mariano de Figueira recibió a grupos de niños provenientes de la Comunidad-Luz Figueira, así como de la escuela Parque Tibetano, de la ciudad de Carmo da Cachoeira, Minas Gerais.

Padre e hija preparan las velas para la peregrinación

En la Colina de las Apariciones (un sector del Centro Mariano) como escenario, se desarrollaron las actividades preparadas, especialmente, para celebrar la fiesta de Nuestra Señora Aparecida y el Día del Niño.

Todo comenzó en la entrada de la colina, donde los niños, visiblemente entusiasmados, junto con profesores, padres y representantes, organizaban las velas, invocaban a sus ángeles de la guarda y se ordenaban para realizar lo que, finalmente, sería una emotiva procesión, que llegó hasta la plaza de San José, ubicada a cierta altura de la colina.

Una vez allí, las historias no se hicieron esperar, y de una manera amena para los pequeños, se les dio a conocer el origen de la gran devoción del pueblo brasileño por Nuestra Señora Aparecida y los detalles de cómo esta se tornó la patrona espiritual del Brasil.

Posteriormente, se los condujo hasta la Casa de María y de esa forma, en ese encuentro lograron saludar a la Santa Madre en su fase de Nuestra Señora Aparecida.

También hubo juegos, merienda y almuerzo. De esta manera festejaron, compartieron y tuvieron su vivencia en ese día especial.

Relicario de San José

Invocando al ángel de la guarda

Entre tanto, los peregrinos procedentes de las ciudades brasileñas de San Pablo, Río de Janeiro, Belo Horizonte y Carmo da Cachoeira, iniciaban su caminata desde Vida Creativa, una de las áreas de hospedaje de la Comunidad-Luz Figueira, hasta la Colina de las Apariciones.

En el salón multiuso de Vida Creativa fue habilitado, por varias horas, el ejercicio espiritual de Contemplación al Relicario de San José.

Al final de la tarde, los peregrinos participaron de la Vigilia de Oración por la Paz en las Naciones, actividad que forma parte de la Campaña por la Paz, de la Asociación María.

Finalizó así el primer tramo de un camino que todavía les aguardaba, con dos días de más vivencias.

Cultivando la cooperación

Sintonía espiritual en el Bosque de la Armonía

Al día siguiente, sábado, la invitación fue para continuar la peregrinación desde tempranas horas de la mañana en el Bosque de la Armonía, un espacio verde que sugiere introspección. En el mismo se encuentra la Oca (local inspirado en las chozas indígenas sudamericanas), que es utilizada para realizar vigilias silenciosas.

Una sintonía espiritual dio apertura a la jornada. Luego, los presentes se organizaron para armonizar el espacio, desplegando acciones espontáneas que los llevó a distribuirse en varios equipos y cubrir satisfactoriamente las tareas planteadas, como la limpieza de los caminos y de las lianas de los árboles.

La energía de armonización se extendió hasta la Ermita de Cristo, uno de los locales de oración de la Colina de las Apariciones, distante pocos metros del Bosque de la Armonía. En ese lugar, una vez concluida la tarea, se realizó una oración de apoyo a la ofrenda realizada con las actividades prácticas del día.

En profunda gratitud

Llegó el día domingo y con él, el tope del camino. El sitio seleccionado fue la Colina de las Apariciones, donde los peregrinos, en profundo agradecimiento por el camino recorrido, ofrecieron a la Madre Universal las mil Avemarías. También colocaron la intención de que por medio de sus oraciones, se abriera un canal para que la Divinidad pudiese llegar a las almas necesitadas de su amor y guía. De esta manera se cerró la peregrinación del mes de octubre, dejando un fin de semana luminoso a través de dos caminos recorridos, el de los niños y el de los peregrinos.

¿Desea participar de estas peregrinaciones?

Comuníquese con el Centro Mariano de Figueira:

centromarianofigueira@associacaomaria.org

WhatsApp +55 35 99720-5624