Movilizado por la energía del servicio, un grupo de jóvenes llevó adelante la Segunda Jornada de la Juventud Misionera por la Paz en Uruguay. La iniciativa forma parte de la Campaña de la Juventud por la Paz y contó con el apoyo de colaboradores de la Red-Luz, monjes de la Orden Gracia Misericordia y de la Fraternidade – Federación Humanitaria Internacional (FFHI). Se realizó el fin de semana del 24 al 26 de agosto de 2018.
El viernes 24 hubo actividades en el Centro Ocupacional para Personas con Discapacidad “Juntos por un sueño”, localizado en el barrio Solymar de Ciudad de la Costa, 26 km al noreste de Montevideo, Uruguay.
Ese día, los presentes compartieron una tarde de música y oraciones, con el acompañamiento de varios instrumentos musicales. Iniciaron también los ensayos para la participación de la institución de asistencia social en el Festival de la Juventud por la Paz, a realizarse en Montevideo, en fecha a definir. Se trabajó con las canciones Regala amor y Paz en la Tierra. Con la letra del primer cántico, después se efectuó un ejercicio de reflexión y profundización.
Debido a las lluvias caídas, las tareas previstas en el área externa fueron canceladas. Finalmente, un grupo más reducido pudo regresar el sábado 1 de setiembre para cumplir con esa parte: la liberación de troncos, ramas y hojas del terreno donde será levantada un aula para taller de carpintería y un horno para taller de cerámica.
Refugio marino
El sábado 25, por la mañana, un grupo de 20 personas se dirigió a un refugio de vida marina ubicado en Punta Colorada, ciudad de Piriápolis (98 km al este de Montevideo), Uruguay. Los participantes ayudaron a limpiar el lugar, cargaron las piscinas donde viven varias tortugas de mar y dieron de comer a los animales (focas, elefantes marinos, lobos marinos y tortugas marinas).
Después del mediodía, el grupo siguió viaje hasta el merendero Los Eucaliptus, ubicado en la ciudad de Maldonado (130 km al este de Montevideo). El lugar atiende a unos 25 menores de escasos recursos, con alimentos, vestimenta, orientaciones educativas y actividades lúdicas. Se ayudó a armonizar el lugar y a clasificar donaciones de ropa. También se compartió con los chicos asistidos una merienda y una tarde musical. Parte del grupo se trasladó al futuro local del merendero, donde colaboró con los trabajos de albañilería.
Llenando una de las piscinas de las tortugas
“En el refugio marino aprendí que basta con entregarse de corazón a la convocatoria, pues las oportunidades de servicio van surgiendo. Llegamos y nos encontramos con que no teníamos ningún plan de acción porque el encargado del lugar pensó que no iríamos debido a que muchas veces la gente promete y no va. Al final, vivimos una hermosa experiencia grupal, en compañía de los Reinos, con mucho amor, alegría y fraternidad”, contó Fiorella Tricotti, una de las participantes.
Lara Añazco, otra de las voluntarias, destacó que “en el momento que se desarrolló el servicio, sentí que era lo único que importaba, que tenía que estar en ese lugar y que era de lo único que me tenía que ocupar, porque estábamos abriendo las puertas para que Dios obre en esos lugares”.
Situaciones de emergencia
Incendio desatado durante la Primera Jornada Misionera en Uruguay
El domingo 26 se desarrolló un estudio sobre el tema: “Acción inmediata en situaciones de emergencias”. Estuvo dirigido a los participantes de la Jornada Misionera y se efectuó en una vivienda de Ciudad de la Costa. Allí, un colaborador bombero brindó una charla sobre cómo actuar en casos de incendios. El tema surgió a raíz de la experiencia vivida durante la Primera Jornada de la Juventud Misionera por la Paz, cuando una precaria casita, aledaña al merendero Los Eucaliptus, en Maldonado, fue consumida por el fuego.
Posteriormente, otra colaboradora, con formación en enfermería, entregó nociones de Primeros Auxilios para situaciones de emergencia.
